
Julio es amarillo, es azul, es verde, es blanco… Es rosa, como mis dalias. Es marrón clarito, como la arena que se me mete entre los dedos de los pies.
Julio es el sonido de las gaviotas, el ruido de las olas, es el silencio de la hora de la siesta.
Julio sabe a moras, a cerezas, a sandía recién cortada. A ensalada de lechuga de la huerta.
Julio huele a eucaliptus, a menta, a romero y a albahaca frescas.
Julio es un abrazo cálido que te envuelve y te dice: respira, descansa, tómatelo con calma.
Julio es como el sábado de los meses.
Este julio 2021, he visto lo sagrado en lo cotidiano al:
- Comenzar a ver con mis ojos el cumplimiento de un sueño.
- Recoger mi primer cosecha de cebollas del huerto
- Encontrar tesoros en la playa
- Esta película
- Volver a jugar a #theminsgame después de 6 meses y concluir que: a) quizás es necesario jugarlo una vez al año, b) darme cuenta de lo diferente que fue esta vez (mucho menos para tirar, la mayoría papeles acumulados, y mucho más fácil el proceso de desprenderse de cosas que ya no me sirven o no añaden valor a mi vida).
Eso es todo amigos, les deseo un mes de Agosto lleno de cosas buenas.
Gracias por estar del otro lado…