Una de las cosas que más me gusta del libro Andando por el Camino es que no da respuestas cerradas sino que da la oportunidad de seguir dialogando, descubriendo nuevas características de Dios, conversar con tus hijos y descubrirlas juntos. Cuando empezamos con este ejercicio de charlar sobre cómo es Dios a partir de las letras del alfabeto (idea que derivó en el libro), al llegar a la letra D y preguntar a mis hijos una característica de Dios, uno de ellos respondió: Dios es divertido. Mi primera reacción fue pensar: «bueno, esa descripción no es muy ortodoxa que digamos». Pero luego me dije: quien diseñó el cuerpo de las gallinas, las mariposas, la forma en que los bebés llegan al mundo, los planetas, el mar, los caballos, las estaciones del año y otras cosas… no puede ser nunca un ser aburrido. ¡Dios es divertido! Dice la Biblia que «en su alegría [Dios] cantará como en día de fiesta» (Sof. 3:17) y que «[Dios] llenará tu boca de risa» (Job 8:21). Un Dios aburrido no canta ni se alegra ni llena de risa a la gente. Dios es divertido. El libro Andando por el Camino da la oportunidad a niños y adultos a seguir profundizando en el conocimiento de Dios. Gracias a mis hijos yo aprendí que Dios es divertido. ¿Cómo es Dios para ti? Quizás creciste pensando que Dios es alguien furioso, castigador, severo, distante, enojado. Si es así, te invito a descubrir a Dios de nuevo. Dios es divertido, quien llena tu boca de risa y canta de alegría por ti!