En este mismo momento Rob Bell está en Paris a punto de dar una charla explorando las ideas de su libro «How to be here» y yo me muero de ganas de estar ahí (por Paris, por el libro, por la charla, por el ambientillo… en fin…) pero estoy aquí, hablando de «Cómo estar aquí» (Se hace lo que se puede o, como diría el autor «this is where I start»- «empiezo por aquí»)
A veces los libros nos llegan en los momentos justos, como un buen compañero de viaje, un mejor amigo, un consejero o alguien que nos guía en la etapa que estamos viviendo. Me pasó hace unos años con Donald Miller (como os conté por aquí). Y me volvió a ocurrir con How to be Here.
La verdad es que no sé si sería capaz de resaltar sólo una frase sobresaliente pues TODO el libro me ha encantado. Lo he devorado en menos de un mes (¡y soy de lectura lenta!). Lo vuelvo a recomendar, especialmente si estás replanteándote tu vida, reinventándote o si sientes que aún no estás cumpliendo tu vocación (llamado, misión, propósito, llámalo como quieras)*, o si estás super ocupado, estresada, si no logras disfrutar plenamente del regalo que es tu vida.
Lo tengo todo subrayado, escrito por los márgenes, así es como me queda en la cabeza lo que leo.
Alguna frase que resalto? Muchas, pero aquí van algunas:
+ La vida es algo que tu creas. No algo que te sucede.
+ El mundo no está terminado y todos estamos en proceso de devenir.
+ La vida es demasiado corta como para crear un mundo en el que no queramos vivir.
+ Muy en el fondo, todos sabemos que todo lo que tenemos es un regalo.
* Todo lo que tenemos es HOY.
¡Y podría seguir con muchas más! Y realmente citar estas frases sería reducir mucho el libro y corro el riesgo de que parezca que el libro está lleno de frases hechas y clichés. No lo está. Os lo vuelvo a recomendar… es más, tengo que leerlo otra vez.
Ya me diréis si os ha enganchado tanto como a mí! Ahora a poner en práctica las ideas y a vivir cada día como el regalo que es.
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* En el libro, el autor desarrolla el concepto de Ikigai, una palabra japonesa que engloba llamado, tu vocación, tu destino, tu camino, tu razón para vivir, lo que te hace levantarte por las mañanas y sentir que tienes una contribución para hacer en el mundo, un trabajo para hacer, que este día (y tu vida) importan.
Como siempre gracias Fanny!
Ay!! Gracias a ti Maru!! Me anima mucho tu comentario y saber que te sirve lo que escribo! Un beso!